México, 8 de julio (Ibercine).- La Filmoteca de la UNAM, el archivo fílmico de la Universidad Nacional Autónoma de México, cumplió este miércoles 8 de julio 60 años de historia en los que se ha convertido en el mayor archivo fílmico de toda América Latina con un reconocimiento internacional.
“Cumplimos 60 años de labor en pro de la cinematografía nacional e internacional” destacó la dirección del archivo ubicado en la Ciudad Universitaria de la capital mexicana, que alberga en sus bodegas varias decenas de miles de títulos entre los que figuran joyas como el negativo de la película Los Olvidados de Luis Buñuel y el más completo archivo fílmico de la Revolución Mexicana, entre otras perlas.
Para conmemorar la efeméride, la Filmoteca, que tiene como objetivo “preservar, rescatar, restaurar y difundir la memoria en movimiento de México”, exhibió hoy la película “Torero”, de Carlos Velo, uno de los primeros filmes con los que comenzó la constitución de su patrimonio fílmico.
El programa, accesible desde la página web de la Filmoteca www.filmoteca.unam.mx incluye también una muestra virtual de las colecciones restauradas por el Centro de Documentación de la Filmoteca, una galería virtual con nueve exposiciones gráficas, cuatro de ellas en 3D y un juego de memoria virtual, informó la Filmoteca en un comunicado.
“Con estas muestras, la Filmoteca de la UNAM pone a disposición en su sitio web el invaluable tesoro icono-fotográfico de la cultura fílmica nacional, que por supuesto también se podrá visitar en sus instalaciones de Ciudad Universitaria cuando las condiciones sanitarias lo permitan” agregó el boletín informativo.
En sus quince bóvedas, la Filmoteca, que dirige Hugo Villa, cuenta con más de 45.000 títulos en más de 400.000 latas conservadas con una temperatura controlada y una humedad relativa constante.
Siete bóvedas están destinadas a almacenar materiales en base de nitrato de celulosa, y las otras ocho bóvedas están equipadas con aire acondicionado y reguladores de humedad, destinadas a los materiales en base de acetato y poliéster, así como a video analógico y digital.
Desde hace más de 35 años, la Filmoteca de la UNAM cuenta además con un laboratorio cinematográfico completo que le ha permitido ser un factor muy importante para el salvamento de una gran cantidad de películas consideradas clásicos del cine mexicano, destacó la dirección del archivo fílmico.
En materia de rescate y preservación, la Filmoteca de la UNAM recuperó una serie de materiales del periodo silente del cine mexicano, entre los que destacan más de siete horas de imágenes documentales sobre la Revolución Mexicana.
Los primeros pasos para la fundación de la Filmoteca comenzaron en 1954 de la mano de Manuel González Casanova, un joven estudiante de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, que había comenzado a promover ciclos de cine en México en pequeñas salas.
El proyecto comenzó a materializarse en una ceremonia presidida por el entonces rector de la UNAM Nabor Carrillo el 8 de julio de 1960, cuando el productor Manuel Barbachano Ponce obsequió a la Universidad una copia de dos de sus películas: “Raíces”, dirigida por Benito Alazraki en 1953, y “Torero”, realizada por Carlos Velo en 1956, donativo con el que se fundó oficialmente la Filmoteca de la UNAM.