Madrid, 6 de abril (Ibercine).- El director español Isaki Lacuesta terminó esta semana en Francia el rodaje de “Un año, una noche”, una historia enmarcada en el atentado de la sala Bataclán de París de 2015, informaron medios españoles.
De acuerdo al diario El País el rodaje terminó en los últimos días en localizaciones de la región de Normandía, noroeste, y de la capital francesa.
En declaraciones al diario, el director subrayó que la película que cuenta el atentado de un comando del Estado Islámico en la sala de conciertos parisina del 13 de noviembre de 2015, no tiene, pese a la fidelidad con la que recrea los hechos, un afán documental.
El rodaje de la cinta, una coproducción hispano-francesa, comenzó el pasado 8 de febrero en Barcelona en diversas localidades catalanas y posteriormente se trasladó a París.
La película está basada en el libro “Paz, amor y Death metal”, de Ramón González, superviviente del atentado terrorista en la sala de conciertos Bataclán de París y cuenta la historia de una joven pareja que asiste a un concierto en Bataclán la noche del atentado.
“Sobrevivirán a ese ataque, pero ya nada volverá a ser como antes”, comentó el comunicado.
Se trata de una “emotiva historia de amor y superación”, que cuenta con un reparto internacional encabezado por Nahuel Pérez Biscayart (120 pulsaciones por minuto), Noémi Merlant (Retrato de una mujer en llamas), Quim Gutiérrez (Ventajas de viajar en tren) y Alba Guilera (Trauma), que interpretan a las dos parejas protagonistas.
“A través de ellos, conoceremos los cuestionamientos éticos, relaciones personales y traumas a los que deben hacer frente, un año después del trágico atentado” comentó el comunicado.
El elenco del film se completa con la participación de la actriz Natalia de Molina (Las niñas, Adiós) y el cantante C. Tangana, que debuta como actor.
El guion fue escrito por Fran Araújo, Isa Campo e Isaki Lacuesta, y de la fotografía se ocupará Irina Lubtchansky (Un hombre fiel, Los fantasmas de Ismael, Tres recuerdos de mi juventud).
«Esta película retrata los efectos de la tragedia alternando en paralelo la noche del atentado y todo el año siguiente; siempre a escala humana, desde la perspectiva de estas dos personas concretas. Buscamos que el espectador sienta y piense lo mismo que Céline y Ramón, lo mismo que nosotros cuando nos contaron su historia: promover la empatía del espectador con esta vivencia y su capacidad de repensar unos acontecimientos determinantes para la comprensión del mundo actual”, declaró el director, Isaki Lacuesta.