David del Río. Biarritz (Francia)
1 de octubre (Ibercine).- Consagrado en el panorama del cine mundial con dos largometrajes, “Aquarius” y “Bacurau”, el director brasileño Kleber Mendonça filho no descarta dar el salto a rodar en inglés y en Estados Unidos como una experimentación.
En entrevista con Ibercine en el marco de la 31 edición del Festival de cine latinoamericano de Biarritz, en el que Kleber Mendonça presentó una selección personal de cine brasileño, el realizador no rechazó la idea de dar el salto al cine estadounidense.
“Amo tanto el cine que tengo una curiosidad muy grande por experimentar. Ahora hago películas muy personales pero no descarto la idea de interesarme por un proyecto así” declaró Kleber Mendonça filho.
El director brasileño puso como ejemplo de cómo hacer convivir dos estilos de cine, en inglés y en español, autoral y comercial, a los directores mexicanos Alfonso Cuarón y Guillermo del Toro, quienes alternaron proyectos como Y tu mamá también o El laberinto del fauno con grandes producciones como Pacific Rim o Harrry Potter.
“Para mi es muy inspirador eso” comentó el director brasileño que de momento ya está trabajando en un proyecto personal titulado “El agente secreto”.
Con las elecciones presidenciales brasileñas como telón de fondo, Kleber hizo un balance “catastrófico” para el cine brasileño del mandato del presidente Bolsonaro.
“En los últimos seis años con Bolsonaro la cultura fue desconectada de la pared como un enchufe que se quita” comentó a este portal de noticias el director brasileño de referencia internacional.
Kleber calificó de “sabotaje” la falta de apoyos a toda la cadena del cine brasileño durante los últimos años.
“Atravesamos los últimos seis años sin apoyos oficiales y los apoyos que hubo fueron saboteados en la práctica (…) Ese sabotaje se hizo muy evidente en los apoyos al cine, a las películas, a los festivales de cine y también a la conservación de la filmoteca brasileña por ejemplo” comentó el director.
“El apoyo oficial del gobierno a la producción forma parte de nuestra Constitución. Así que fue una falta de respeto inconstitucional, un sabotaje de la cultura brasileña”, subrayó.
Pero “artísticamente el cine brasileño continuó muy fuerte” comentó el director de “Aquarius”.
Kleber consideró que en los últimos años creció la diversidad del cine brasileño y la expresión de nuevos puntos de vista.
“Creo que aumentó la diversidad de voces, de razas, de geografía. Me parece cada vez más fuerte no por las políticas públicas sino también por las cámaras (réflex) como la suya que permiten que tengamos puntos de vista que no teníamos años atrás” comentó.
“Los años Bolsonaro tienen un aspecto de manicomio. Como si todo lo que se hablara no tuviera ningún sentido, fuera completamente estúpido y con una lógica criminal, muy perturbador” estimó Kleber Mendonça.
“Filmamos Bacurau nueve meses antes de que llegara Bolsonaro pero ya existía una atmósfera en el país muy Bacurau (esperpéntica) y hoy es casi normal en los absurdos del país” agregó el director que reconoció que sus películas, aunque no sean estrictamente políticas, reflejan la situación de su país.
“No puedo escribir un nuevo guion e ignorar lo que pasa en el mundo o en el país. Pero nunca haría una película “militante”, concluyó Kleber Mendonça.
Su selección para el Festival de Biarritz de diez películas representativas de la historia del cine brasileño puede consultarse en esta página.