Por Adela Mac Swiney González
México, 5 de agosto (Ibercine).- Después de que su cortometraje “La huella” (2017) haya estado y se siga viendo en diversos festivales de cine en el mundo, el director y productor mexicano Carlos Andrade prepara un largometraje que tiene mucho que ver con la alfabetización de los mayas en la época del educador y filósofo mexicano José Vasconcelos.
En entrevista con Ibercine, Andrade dio avances de este próximo proyecto, aunque “no sé cuando lo podré tener listo”, ya que muchas cosas se han paralizado por la crisis sanitaria del coronavirus Covid-19, comentó.
“Se trata de una historia de época, bonita, me quería salir un poco de los temas horripilantes, ya me estaba cansando de ver pura muerte y hablar de pura cosa problemática”, señaló en referencia a “La huella”, que pudo verse a fines de junio pasado de manera gratuita y virtual a través de una iniciativa del Festival Internacional de Cine de Huesca y el Instituto Cervantes.
Viviendo la crisis sanitaria por el Covid-19 en una población del Estado de Morelos, centro de México, el cineasta dio a conocer que además del proyecto de largometraje, está participando en una convocatoria para hacer el guion de uno o dos cortometrajes sobre el confinamiento.
“Un grupo de productores aquí en México quieren hacer un largometraje a partir de varios cortos del confinamiento, eso es lo que estoy trabajando en cine, pero por lo demás todo está muy parado en el país lo que se suma a que hay nuevas reglas, no se pueden grabar muchas cosas, escenas con o que tengan que ver con sexo, besos, de amor”, dijo.
Sobre “La huella”, Andrade manifestó su sorpresa de que siendo un cortometraje de 2017 siga estando en festivales y proyectándose en diversos lugares del mundo.
En marzo pasado, el cortometraje, una denuncia ante la falta de libertad y la impunidad en los asesinatos de periodistas en México, estuvo en el Festival de Cine Europeo de Lille, Francia, y es posible que esté en un certamen de Nicaragua.
El hecho de que el corto siga en festivales y de haber estado en la programación del Festival de Cine de Huesca con el Instituto Cervantes, así como que esté disponible en la plataforma Filmin Latino, “me da esperanza de que siga viéndose”, comentó Andrade.
“Te podría decir que es un corto viejo, esos cortos tienen poca vida, ya hace más de dos años que empezó a andar por festivales lo que comprueba que el corto sigue vivo porque el tema sigue vivo; en México han bajado las muertes de periodistas pero sigue habiendo muertes, desde que entró este nuevo gobierno se han registrado 14 muertes de periodistas, aunque también han sido asesinados activistas”, resaltó.
Dado que en las últimas semanas los festivales que no se cancelaron se trasladaron al formato virtual, Andrade aseguró que todo esto ofrece un escenario muy interesante y la nueva normalidad “obviamente va a cambiar algunas cosas pero no todo”.
“Es muy interesante ver que la gente puede estar en cualquier lado viendo las películas, los cortos por streaming y así nosotros, cuando menos, vamos a poder mostrar nuestro trabajo a mucha más gente, eso es muy interesante, aunque también sería muy padre poder ver, leer, oír las críticas, los comentarios porque eso nos ayuda a que nuestro trabajo mejore y poder hablar de temas que a la gente le importe”, comentó.
Sobre la presentación de “La huella” en el Festival de Cine de Huesca en 2018, donde obtuvo el premio Danzante Iberoamericano consideró que fue una experiencia maravillosa “que a mí me ha marcado, me ha ayudado muchísimo, me ha llevado a muchos lados porque fue el primer certamen en el que participó el corto en realidad”.
Después de Huesca, donde Andrade dijo que había hecho el corto para México, éste se ha movido por otros muchos lugares, y se ha llevado otros premios. “La gente lo ha visto, a veces no lo entienden muy bien, pero les pega, no sé, es un corto raro, y a mi me gusta que sea raro”.
“Yo comenté que había hecho este corto para México porque a final de cuentas es una denuncia, una denuncia que solo puede ser resuelta en México. Posiblemente en muchos países haya el mismo problema pero en ese momento el país estaba en un momento de locura, estábamos logrando el horrorífico lugar de primer sitio en el mundo de asesinato de periodistas y no solamente de periodistas”, precisó Carlos Andrade.
El cineasta recordó que el día que presentaron “La huella” en Huesca, “la respuesta en la sala fue extraña, la gente se quedó callada, de pronto alguien aplaudió, pero la gente se quedó callada, salió un poco sin entender qué estaba pasando, no es un corto fácil, no es un corto que explique todo, casi, casi al final te enteras de qué va pero esa de pronto es la respuesta que uno quiere, quiere que la gente mueva algo, que la gente piense en otras cosas y es maravilloso si el corto está logrando ese objetivo”.
“A veces hay hasta problemas con el público porque hay gente que lo puede odiar, obviamente no le gusta sentir ese tipo de cosas, pero de eso se trata finalmente, de no quedarse callados, de no quedarse pensando solamente en lo bonito que es la vida y todo son telenovelas, hay cosas más importantes” concluyó Andrade.